
Hoy, buscando esos primeros poemas que, junto a los del decimonónico Rubén Darío conformaron el rito iniciático, me topé con su página personal y sin mediar resuello añadí a este caótico confabulario de filias. Así pues disfruten de este poema musicalizado suyo y déjense llevar de la mano de Roberto Arizmendi quién hoy se nos une, al fin y al cabo no somos más que historias compartidas
La vida comienza aquí contingo
La vida comienza aquí
contigo.
Antes fue sólo intento reiterado
para buscar la punta del hilo
de esta enorme maraña de tristezas.
El compromiso de partido
fue sólo la mitad de mis opciones
y ahora llegas tú
para integrar de plano mi bandera.
Aquí está ya
el perfil de la tela
para poder empuñarla.
Que no nos rompan el camino
antes de andarlo.
Estoy haciendo contigo
mi compromiso con la historia;
temo a los fuegos que consumen
nuestro horizonte
antes de crearlo.
Yo no sé de consignas
si mis labios no absorben tu tristeza.
No sé de acuerdos
si mi boca no alcanza a saborear
el oculto sabor de tus jardines.
La vida comienza aquí,
te digo,
aunque tu risa no marque todas
mis mañanas,
aunque no pueda deletrear aún
todos tus cantos
Despedida
Cuando alguna vez no llegue a casa
no podrás soportarlo.
Si alguna vez no llego,
puedes estar segura
que decidí amar
hasta la libertad
o hasta la muerte.
Insomnios
Yo no sé si tu noche
abrigue mis ensueños
pero sé que tu luna
alumbra mis secretos.
Samba de Saudade.m... |
Comentarios